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MIEDO

Estamos viviendo una época en la que la sensación de inestabilidad surge como consecuencia de una supuesta transformación que traerá beneficios a todos los mexicanos.

Sin embargo lo que se percibe es todo lo contrario. Desde sexenios pasados ya se había desatado una aparente guerra  en contra del narcotráfico y surgieron situaciones que pusieron nuestra seguridad en ciernes. A pesar de ello continuamos sin queja alguna nuestra vida y trabajo.

Los focos de nuestra guía social cambiaron de verde a ámbar. Aún así, decidimos que no pasaba nada. Surgieron problemas, estafas maestras, o no, complicidades que distrajeron nuestra atención como Ayotzinapa, corrupción la llegada del Presidente Trump y no vimos (y seguimos sin ver) lo que estaba por llegar.

Cansancio de la sociedad, del electorado. Un trabajo persistente, no del todo sutil, permeó poco a poco -como la humedad en una pared-  hasta que finalmente llegó el hastío.  Un 50-60 por ciento del electorado votó por la “cuarta transformación” y el resto no estuvo de acuerdo, dividido como siempre dejo que otros tomaran las riendas y así llegamos al día de hoy.

¿De qué nos quejamos?

Los focos ámbar ahora pasaron a una luz roja constante y se desató el miedo colectivo.

Noam Chumsky, lo advirtió claramente en una entrevista el 2 de julio del 2017 (El Espectador) con estas palabras:

“En cuanto al presidente actual, Donald Trump, el pensador asegura que mantendrá la postura tradicional de hostilidad de Estados Unidos hacia los gobiernos independientes de base popular en América Latina”. En este sentido, Chomsky recuerda que esta postura se manifestó bajo el mandato de Barack Obama “quizás con mayor intensidad”, siendo Honduras un “ejemplo dramático”.

“Hasta ahora, poco se ha hablado sobre América Latina, aparte de agitar los puños en México. Pero esto es lo que sugeriría la orientación general de la política”.

Con esto en mente, y el nuevo Gobierno los dados están en la mesa.

Estamos frente a un evento cuyos orígenes tienen un toque maquiavélico, multifactorial.  Nada espontáneo o al azar. Al contrario, las mentes brillantes han provocado  miedo, si un miedo necesario para controlar.

Aquí mi estimado lector queda muy bien las palabras que el carcelero de Trotsky (Serie  Netflix).

-Eres un fenómeno Bronstein (nombre verdadero de Trotsky) (Carcelero)

-El pueblo ruso solo puede ser controlado para su propio bien (Carcelero).

-¿Por qué golpear a un hombre sin culpa? (Bronstein)

-¿De qué modo controlas a las personas? (Carcelero)

-Siendo un ejemplo, llevándolos a los ideales de justicia (Bronstein)

-Controlar a la gente solo es posible con el miedo. El miedo es la base de cualquier orden (Carcelero).

¿En desacuerdo?

El miedo es un factor que provoca una sensación de angustia real o imaginaria, con sentimiento de desconfianza, lo que ayuda a buscar una solución. Esa solución, podría estar en camino, aunque ya definida por los que han incitado este proceso.

¿Alguna idea?

Algunos la llaman conspiración o complot.

Por ahí, como decimos, cuando el rio suena…..

Parece ser que Rusia estaba financiando la producción de petróleo de Venezuela a cambio de oro y México compraría ese combustible, dejando de obtenerlo de Estados Unidos. Pero… una llamada interceptada en un avión comercial permite que Washington se percate del plan e inicia el bloqueo de gasolina procedente de Venezuela y desconoce al gobierno de la dictadura.

Esto resultó ser de gran impacto para México, ya que había dejado de comprar la mitad del combustible en diciembre  y los venezolanas no pudieron surtir lo pactado ya que iban a rentar buques cisternas a compañías norteamericanas.

De ahí surge, gracias a la asesoría del Kremlin la idea del combate al huachicol, y para contentar a los gringos hicieron compras importantes de hidrocarburos y de pipas, sin considerar a los productores mexicanos.

Con esto, la estrategia del eje Moscú, Caracas Ciudad de México ha visto sus planes derrumbados e intentan ganar tiempo para no perder todo lo invertido. Ahí  la razón de México convertirse en mediador  del conflicto.

Parece una novela, pero muchas veces la realidad supera a la ficción.

Desafortunadamente hay miedo y esto permite el control de un pueblo cuyas creencias religiosas y su historia no ayudan mucho a supéralo.

¡Hasta la próxima!

Comentarios: dr_rethcuel@yahoo.com

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